En la búsqueda del mejor lugar donde colocar su dinero, surge la pregunta de banco o cooperativa de crédito. ¿Cuál es el mejor para usted? ¿Qué servicios, como cajeros automáticos o aplicaciones gratuitas, merecen la pena y cuáles son lujos? ¿Cuánto cuesta realmente? ¿Debería elegir un banco local o una marca reconocida a nivel nacional?
Empecemos por los pros y los contras de utilizar un banco o una cooperativa de crédito. Ambas instituciones financieras ofrecen muchos de los mismos servicios, como cuentas corrientes y de ahorro y préstamos personales. Sin embargo, los bancos son organizaciones con ánimo de lucro, mientras que las cooperativas de crédito son sin ánimo de lucro. Los bancos suelen ser más rápidos a la hora de ofrecer nuevas tecnologías y herramientas a sus socios, pero el servicio de atención al cliente suele ser mejor en las cooperativas de crédito que en los grandes bancos. Las cooperativas de crédito también ofrecen tipos de interés más altos en los depósitos y tienen comisiones más bajas en los préstamos que los bancos. Tanto los bancos como las cooperativas de crédito aseguran sus fondos hasta $250.000.
En cuanto a la accesibilidad, los grandes bancos nacionales tienen sucursales en todo el país, mientras que los bancos más pequeños cubren regiones más pequeñas. Las cooperativas de crédito suelen tener menos sucursales que los bancos, pero algunas participan en una red de sucursales compartidas, lo que le permite realizar transacciones comerciales en la ubicación física de un socio de la red.
La mayor diferencia entre los bancos y las cooperativas de crédito está en la razón de ser de cada uno. Los bancos son instituciones con ánimo de lucro, mientras que las cooperativas de crédito son instituciones sin ánimo de lucro. Dado que los bancos existen principalmente para obtener beneficios, sus operaciones giran en torno a la maximización de dichos beneficios. Las cooperativas de crédito existen para servir a una comunidad específica de personas relacionadas por factores que pueden basarse en la ubicación geográfica, el empleador, la pertenencia a otra asociación (como el ejército), la fe u otros factores. Las cooperativas de crédito ofrecen diversos productos financieros a sus socios con las condiciones más favorables posibles. Los descuentos en los tipos de interés de los préstamos, las comisiones reducidas y otras ventajas exclusivas para sus socios son los motivos por los que muchas personas eligen una cooperativa de crédito en lugar de un banco.
En última instancia, a la hora de tomar la decisión de dónde colocar su dinero, tendrá que decidir qué es importante para usted y qué entidad financiera le ofrece los servicios y productos que más desea. Como no está limitado a elegir una u otra, puede abrir cuentas tanto en su banco local como en la cooperativa de crédito de su elección. Con el tiempo y el uso continuado, descubrirá cuál sirve mejor a sus intereses y satisface sus necesidades financieras.